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FIESTA DE SANTO TOMÁS, APÓSTOL

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Lectura del santo evangelio según san Juan 20, 24-29 Tomás, uno de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Y los otros discípulos le decían: «Hemos visto al Señor». Pero él les contestó: «Si no veo en sus manos la señal de los clavos, si no meto el dedo en el agujero de los clavos y no meto la mano en su costado, no lo creo». A los ocho días, estaban otra vez dentro los discípulos y Tomás con ellos. Llegó Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio y dijo: «Paz a vosotros». Luego dijo a Tomás: «Trae tu dedo, aquí tienes mis manos; trae tu mano y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente». Contestó Tomás: «¡Señor mío y Dios mío!». Jesús le dijo: «¿Porque me has visto has creído? Bienaventurados los que crean sin haber visto». Palabra del Señor REFLEXIÓN Ver para creer Hoy celebramos la fiesta de Santo Tomás Apóstol, un apóstol conocido por ser incrédulo ante la noticia de la resurrecci...

JUEVES DE LA XIII SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

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Lectura del santo evangelio según san Mateo 8, 28-34 En aquel tiempo, llegó Jesús a la otra orilla, a la región de los gadarenos. Desde los sepulcros dos endemoniados salieron a su encuentro; eran tan furiosos que nadie se atrevía a transitar por aquel camino. Y le dijeron a gritos: «¿Qué tenemos que ver nosotros contigo, Hijo de Dios? ¿Has venido aquí a atormentarnos antes de tiempo?». A cierta distancia, una gran piara de cerdos estaba paciendo. Los demonios le rogaron: «Si nos echas, mándanos a la piara». Jesús les dijo: «Id». Salieron y se metieron en los cerdos. Y la piara entera se abalanzó acantilado abajo al mar y murieron en las aguas. Los porquerizos huyeron al pueblo y lo contaron todo, incluyendo lo de los endemoniados. Entonces el pueblo entero salió a donde estaba Jesús y, al verlo, le rogaron que se marchara de su país. Palabra del Señor REFLEXIÓN El poder de Jesús nos aleja del mal Ayer el Evangelio culminó c...

MIÉRCOLES DE LA XIII SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

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Lectura del santo evangelio según san Mateo 8, 28-34 En aquel tiempo, llegó Jesús a la otra orilla, a la región de los gadarenos. Desde los sepulcros dos endemoniados salieron a su encuentro; eran tan furiosos que nadie se atrevía a transitar por aquel camino. Y le dijeron a gritos: «¿Qué tenemos que ver nosotros contigo, Hijo de Dios? ¿Has venido aquí a atormentarnos antes de tiempo?». A cierta distancia, una gran piara de cerdos estaba paciendo. Los demonios le rogaron: «Si nos echas, mándanos a la piara». Jesús les dijo: «Id». Salieron y se metieron en los cerdos. Y la piara entera se abalanzó acantilado abajo al mar y murieron en las aguas. Los porquerizos huyeron al pueblo y lo contaron todo, incluyendo lo de los endemoniados. Entonces el pueblo entero salió a donde estaba Jesús y, al verlo, le rogaron que se marchara de su país. Palabra del Señor REFLEXIÓN El poder de Jesús nos aleja del mal Ayer el Evangelio culminó c...

MARTES DE LA SEMANA XIII DEL TIEMPO ORDINARIO

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Lectura del santo evangelio según san Mateo 8, 23-27 En aquel tiempo, subió Jesús a la barca, y sus discípulos lo siguieron. En esto se produjo una tempestad tan fuerte, que la barca desaparecía entre las olas; él dormía. Se acercaron y lo despertaron gritándole: «¡Señor, sálvanos, que perecemos!». Él les dice: «¿Por qué tenéis miedo, hombres de poca fe?». Se puso en pie, increpó a los vientos y al mar y vino una gran calma. Los hombres se decían asombrados: «¿Quién es este, que hasta el viento y el mar lo obedecen?». Palabra del Señor REFLEXIÓN La fe, un don y una respuesta Hoy el tema del Evangelio es la fe, una fe tambaleante de unos discípulos que estaban comenzando a conocer a la persona de Cristo. Es fundamental para nuestra vida comparar este relato evangélico con nuestra vivencia diaria, en especial en los momentos más fuertes y dolorosos de la vida, en donde sentimos la presencia de Cristo, pero de una manera inexplicable: dormido. ¿Por q...

SOLEMNIDAD DE LOS SANTOS PEDRO Y PABLO, APÓSTOLES

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Lectura del santo evangelio según san Mateo 16, 13-19 En aquel tiempo, al llegar a la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: «¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?». Ellos contestaron: «Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno de los profetas». Él les preguntó: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?». Simón Pedro tomó la palabra y dijo: «Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios vivo». Jesús le respondió: «¡Bienaventurado tú, Simón, hijo de Jonás!, porque eso no te lo ha revelado ni la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Ahora yo te digo: tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del reino de los cielos; lo que ates en la tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará desatado en los cielos». Palabra del Señor Pedro y Pablo, apóstoles radicales del amor de Jesús. Hoy la I...

SER-PARA-DIOS

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La voz ser ha sido materia en cuestión en el mundo de la filosofía, a pesar de que Heidegger haya afirmado la existencia de un “olvido del ser”, esta palabra de sólo tres letras ha sido cuestionada y estudiada por mucho tiempo, buscando el fin último de su amplio y complejo significado. Hoy, Jesús nos muestra un problema ontológico parecido al que se planteaba Parménides con su “Ser y no-ser”, y precisamente la cuestión va en torno a lo que en realidad significa “Ser-cristianos”, a lo mejor son palabras incomprensibles y más en un ambiente en donde a quienes vemos a diario es a éstos que Jesús nombra al inicio del evangelio, pero hay algo más allá que el Señor quiere que hoy comprendamos y pongamos en práctica, y es que la esencia del “ser-cristiano” es que somos para Dios, vivimos, existimos y estamos para Dios. Solemos decir que, cuando nos tocan a la familia, es una ofensa gravísima que nos llena de ira, hoy Jesús nos toca a la familia pero esta vez no nos causa ira, sino confus...

UNA RECOMPENSA INIGUALABLE

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Hoy el Señor nos trae una palabra que nos gusta mucho: Recompensa. Viene del griego δώσει y la palabra literalmente indica "dar otra vez" en nuestro caso, volver a recibir, es como un premio después de un esfuerzo. La primera lectura indica la recompensa que tuvo Elías y el Evangelio la recompensa de aquél que practica de corazón, el amor a Dios, al hermano y a sí mismo, tanto Elías como las personas que practican esto de corazón, son las que viven lo recitado en el salmo "Espera en el Señor". Que tendremos recompensa en un tiempo en donde la caridad se vuelve tan vulnerable como nosotros lo somos, es un signo de esperanza en medio de tanta tristeza y desespero. Hay una palabra utilizada en el Evangelio y es "justicia" pero Jesús se refiere a una en específica practicada en la cultura judía, y es el "tzedaká" una justicia social, pero como estaba estipulada en sus propias normas no era algo privado sino público, los fariseos alardeaban entre todo...